CRÍTICA DE NEREA URBIETO:
Rigurosa y genial, 'Asins' era Elena.
Doble exposición
en Elvira González y Freijo Gallery
ABC CULTURAL
4/4/2024

Dos galerías en Madrid (Freijo y Elvira González) muestran, en solitario y en dúo, la obra de la pionera del arte por ordenador.

Algo perturba la atención del espectador si observa con exhaustividad la exposición de Elena Asins en la galería Elvira González, una mínima corrección al final del pulcro recorrido de una de las obras. No es que el retoque con típex altere la armonía general de la composición, la mayoría no lo percibirán, sin embargo, imagino el trastorno que supuso para la artista.

Rigurosa hasta la obsesión, amante de la estructura, lo numérico y lo racional, Asins buscaba construir un mundo perfecto (el suyo), alejado de los errores de cálculo y, por supuesto, de lo emocional. Su cuerpo de trabajo, variado en formatos y estrategias, responde a este objetivo y se materializa con rasgos categóricos: base computacional, estética minimalista, geométrica y metodológica, siempre en blanco y negro, absoluta depuración formal, aspecto de pentagrama con un ritmo inherente y, sobre todo, composiciones que atendían a una lógica matemática: «Mi obra se genera a sí misma porque parte de una ecuación». La individual muestra una espléndida selección de obras grandes en papel, desde finales de los 70 hasta principios de los 90, que recogen su estilo genuino con elegancia, sencillez y ascetismo.

Mirar hacia arriba

Vemos diversas series con sus variaciones ('Zettel', 'Canons') y piezas mostradas al público por primera vez: 'Ying-Yang', de 1980 (no olviden mirar al techo si quieren disfrutar del friso a partir de 64 cuartillas); 'Dia-theke', de 1988-1991, o 'E70 KV589' (1980), una cartulina de nueve metros que impacta e imbuye al espectador en su proceso creativo. En este sentido, todas las obras funcionan más a modo de lectura gráfica que como experiencia plástica.

Hay algo lúdico en las configuraciones que invitan al observador a buscar la fórmula generadora de la diferencia en la siguiente variación. El procedimiento exige tiempo, un elemento crucial en el entendimiento de su obra: el transcurrir, la mutación y la memoria son constantes que comparte con la música.

Sin movernos de la capital, la galería Freijo también expone a la artista promotora del arte cibernético, pero en diálogo con otra trabajadora incansable, la francesa Ode Bertrand (1930). Aunque los puntos de partida son muy diferentes –la obra de Bertrand es abstracción geométrica sin uso del ordenador– hay evidentes nexos y resonancias: el orden, la meticulosidad, el predominio del blanco y negro y la línea, las interacciones sutiles, la repetición o la musicalidad.

Doble exposición de Elena Asins en Madrid

Galería Elvira González. Madrid. C/ Hermanos Álvarez Quintero, 1. Hasta el 14 de mayo. Cuatro estrellas.

Asins & Bertrand. 'Variaciones geométricas'. Freijo Gallery. Madrid. C/ Zurbarán, 46. Hasta el 4 de mayo. Cuatro estrellas.

De Bertrand hay mayor número de piezas, desde los 80 hasta hoy (la artista sigue en activo a sus 94 años); de Asins, encontramos obras un poco posteriores a las de Elvira González, véase los 'Cuartetos prusianos' (1997), de metal sobre madera en honor aMozart, o los 'Dólmenes' (1994), 'collages' que conectan con el lado más espiritual de la artista, el que aspiraba a la transcendencia. 

Two galleries in Madrid (Freijo and Elvira González) show, solo and in duo, the work of the pioneer of computer art.

Something disturbs the viewer's attention if he or she looks at the exhibition of Elena Asins at the Elvira González galleryin depth, a minimal correction at the end of the neat tour of one of the works. It is not that the touching up with a touch-up with a pencil alters the general harmony of the composition, most will not notice it, but I can imagine the disturbance it caused for the artist.

Rigorous to the point of obsession, a lover of structure, the numerical and the rational, Asins sought to construct a perfect world (her own), far removed from miscalculation and, of course, the emotional. His body of work, varied in formats and strategies, responds to this objective and materialises with categorical features: a computational base, minimalist, geometric and methodological aesthetics, always in black and white, absolute formal purification, the appearance of a pentagram with an inherent rhythm and, above all, compositions that follow a mathematical logic: "My work generates itself because it starts from an equation". The individual exhibition shows a splendid selection of large works on paper, from the late 1970s to the early 1990s, which reflect his genuine style with elegance, simplicity and asceticism.

Looking up

We see several series with their variations ('Zettel', 'Canons') and pieces shown to the public for the first time: 'Ying-Yang', from 1980 (don't forget to look at the ceiling if you want to enjoy the frieze from 64 pages); 'Dia-theke', from 1988-1991, or 'E70 KV589' (1980), a nine-metre cardboard that impacts and imbues the spectator with its creative process. In this sense, all the works function more as a graphic reading than as a plastic experience.

Untitled'. 64 elements. 24 x 24 cm ABC

There is something playful in the configurations that invite the observer to look for the formula that generates the difference in the next variation. The procedure demands time, a crucial element in the understanding of his work: passing, mutation and memory are constants that he shares with music.

Without moving from the capital, the Freijo gallery also exhibits the artist promoter of cybernetic art, but in dialogue with another tireless worker, the French Ode Bertrand (1930). Although the starting points are very different - Bertrand's work is geometric abstraction without the use of the computer - there are evident links and resonances: order, meticulousness, the predominance of black and white and the line, subtle interactions, repetition and musicality.

Double exhibition of Elena Asins in Madrid

Elvira González Gallery. Madrid. C/ Hermanos Álvarez Quintero, 1. Until 14 May. Four stars.

Asins & Bertrand. Geometric Variations'. Freijo Gallery. Madrid. C/ Zurbarán, 46. Until 4 May. Four stars.

There are more pieces by Bertrand, from the 80s to the present day (the artist is still active at the age of 94); by Asins, we find works a little later than those by Elvira González, see the 'Prussian Quartets' (1997), metal on wood in honour of Mozart, or the 'Dolmens' (1994), 'collages' that connect with the artist's more spiritual side, the one that aspired to transcendence.

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